¡Oye, bandita! En este mar de cartas, el blackjack es un duelo de nervios. Mi truco: contar cartas no es solo matemáticas, es instinto. Aprende a leer al crupier, su mirada, su pausa. Si la mesa está caliente, apuesta fuerte al negro, pero si el viento cambia, retrocede. La clave está en dominar...