Qué tal, banda, aquí va mi análisis porque esto de las apuestas a tarjetas en la Europa League está siendo un completo desmadre esta temporada. No sé si soy el único que lo nota, pero las cosas no están funcionando como antes. Siempre me ha gustado meterme en el rollo táctico de los equipos europeos, estudiar cómo juegan, cómo se comportan los técnicos y qué tan agresivos son los planteamientos, pero este año todo eso parece no valer nada cuando se trata de predecir cuántas amarillas van a caer.
Primero, los árbitros están más locos que nunca. Un día te pitan hasta por respirar cerca del rival, y al siguiente dejan pasar faltas que parecen de lucha libre. Por ejemplo, miren los partidos del grupo de la Lazio contra el Porto: en un duelo te sacan 8 amarillas porque sí, y en otro apenas llegan a 2 cuando los jugadores estaban dándose con todo. ¿Cómo le haces para armar un pronóstico decente con esa inconsistencia? Antes podías confiar en que ciertos refs eran más estrictos o que equipos como el Besiktas o el Olympiacos, con su estilo físico, iban a generar un buen número de tarjetas, pero ahora es una lotería.
Y luego están los equipos. Muchos están jugando como si no les importara acumular sanciones. Los técnicos están rotando tanto por los calendarios apretados que ya no sabes si el mediocampo va a ser de contención dura o de puros chavales que no saben ni tacklear bien. Tomemos al Tottenham en su último partido contra el Ferencvaros: esperabas un juego rudo por su estilo inglés, pero nada, apenas un par de amarillas porque salieron a medio gas. En cambio, equipos como el Fenerbahce, que suelen ser un caos organizado, de repente se contienen y te arruinan la apuesta.
Ni hablar de las estadísticas, que este año no sirven ni para limpiarse. Los promedios de temporadas pasadas se fueron al carajo. Antes podías decir "este equipo en casa siempre saca más de 3 amarillas" o "contra rivales del Este de Europa se descontrolan", pero ahora no hay patrón. La Europa League está tan impredecible que parece que los jugadores y los árbitros se ponen de acuerdo para hacer lo contrario de lo lógico. Y no me vengan con que "es cuestión de estudiar más los duelos", porque llevo años haciéndolo y esta temporada es como tirar dados.
Total, apostar a tarjetas ahorita es un boleto seguro para perder lana. Si alguien tiene un método que le esté funcionando, que lo comparta, porque yo ya estoy harto de quemar dinero en esto. Por ahora, mejor me paso a los goles o al hándicap, que al menos ahí los equipos no te traicionan tanto. ¿Qué opinan ustedes? ¿También están hasta el cuello con este desastre o soy el único que no le encuentra el modo?
Primero, los árbitros están más locos que nunca. Un día te pitan hasta por respirar cerca del rival, y al siguiente dejan pasar faltas que parecen de lucha libre. Por ejemplo, miren los partidos del grupo de la Lazio contra el Porto: en un duelo te sacan 8 amarillas porque sí, y en otro apenas llegan a 2 cuando los jugadores estaban dándose con todo. ¿Cómo le haces para armar un pronóstico decente con esa inconsistencia? Antes podías confiar en que ciertos refs eran más estrictos o que equipos como el Besiktas o el Olympiacos, con su estilo físico, iban a generar un buen número de tarjetas, pero ahora es una lotería.
Y luego están los equipos. Muchos están jugando como si no les importara acumular sanciones. Los técnicos están rotando tanto por los calendarios apretados que ya no sabes si el mediocampo va a ser de contención dura o de puros chavales que no saben ni tacklear bien. Tomemos al Tottenham en su último partido contra el Ferencvaros: esperabas un juego rudo por su estilo inglés, pero nada, apenas un par de amarillas porque salieron a medio gas. En cambio, equipos como el Fenerbahce, que suelen ser un caos organizado, de repente se contienen y te arruinan la apuesta.
Ni hablar de las estadísticas, que este año no sirven ni para limpiarse. Los promedios de temporadas pasadas se fueron al carajo. Antes podías decir "este equipo en casa siempre saca más de 3 amarillas" o "contra rivales del Este de Europa se descontrolan", pero ahora no hay patrón. La Europa League está tan impredecible que parece que los jugadores y los árbitros se ponen de acuerdo para hacer lo contrario de lo lógico. Y no me vengan con que "es cuestión de estudiar más los duelos", porque llevo años haciéndolo y esta temporada es como tirar dados.
Total, apostar a tarjetas ahorita es un boleto seguro para perder lana. Si alguien tiene un método que le esté funcionando, que lo comparta, porque yo ya estoy harto de quemar dinero en esto. Por ahora, mejor me paso a los goles o al hándicap, que al menos ahí los equipos no te traicionan tanto. ¿Qué opinan ustedes? ¿También están hasta el cuello con este desastre o soy el único que no le encuentra el modo?