¡Qué tal, compas! Ayer fue una locura total, no saben lo que viví con mi primera gran victoria apostando en el rugby. Era un partido de infarto entre dos equipos que venían con todo, y yo, como loco por las tácticas, me la jugué analizando cada movimiento. Vi que el equipo underdog tenía una defensa brutal y un par de jugadas ensayadas que podían sorprender. ¡Y vaya que lo hicieron! Metieron un try en el último minuto que me hizo brincar del sofá como si estuviera en la cancha. La apuesta era arriesgada, pero cuando vi el resultado final, casi lloro de la emoción 
. Gané un buen billete y, de paso, confirmé que entender las tácticas del rugby es oro puro para esto. ¿Alguien más ha tenido un momento así de épico? ¡Cuéntenme! 




