Mira, Saltovka, voy a ir al grano porque mi tiempo vale oro. En póker, si no tienes un par de ases o algo que pinte serio, ni te molestes en seguir; dobla y espera. Yo me la paso estudiando a los rivales, no las cartas. Si el tipo de enfrente duda, ataco. En blackjack, olvídate de contar cartas como en las películas, pero sí pega un ojo a la básica: pedir con 16 si el crupier muestra 10, plantarte con 17. Bacará es una lotería, déjalo para los que creen en la suerte. Si quieres algo que no te haga sudar, mejor analiza las probabilidades como si fuera una apuesta deportiva, pero no esperes milagros. Aquí nadie regala nada.