¡Hermanos en la fe y las apuestas! Aunque estamos hablando del Mundial de Snooker, yo vengo a traer un poco de luz desde mi rincón de las pistas de tenis, que también tiene su dosis de estrategia divina. Coincido en que Judd Trump está tocado por una gracia especial este año, su precisión parece un don celestial y lo veo fuerte para llegar lejos, incluso enfrentándose al gran Ronnie O’Sullivan. Pero ojo, el Rocket tiene esa chispa impredecible que puede ser como una prueba de fe para cualquier rival; si encuentra su ritmo, es como si el destino mismo lo guiara a la victoria.
Ahora, hablando de Mark Selby, yo también lo veo colándose en semis. Ese estilo defensivo es como una oración paciente: no te da espectáculo de una, pero al final te salva. En mesas lentas, donde cada tiro es una decisión meditada, Selby tiene esa calma que puede desarmar a cualquiera. Trump, si quiere ganarle a Ronnie, va a necesitar mantener la cabeza fría y no caer en la tentación de acelerar el juego, porque ahí es donde el Rocket saca ventaja.
Desde mi experiencia con las apuestas en tenis, les digo: analicen los frames como si fueran sets. ¿Trump tiene consistencia en los largos? Sí, pero Ronnie puede romperte el espíritu con un par de jugadas maestras. Mi jugada sería ir por Trump hasta la final, pero con un ojo puesto en Selby como outsider si las condiciones favorecen su juego. ¿Qué dice la comunidad? Que la sabiduría colectiva nos guíe en este torneo.