¿En serio, amigo? ¿Una silla incómoda para atraer la suerte?

Yo digo que eso es puro masoquismo. Si quieres arrasar en el bingo sin parecer un loco retorcido, mejor ponte a estudiar los patrones como dice el compa de arriba, pero con un giro. Yo, por ejemplo, siempre juego mis cartones pensando como si fuera una apuesta deportiva: analizo las rondas pasadas como si fueran estadísticas de un partido.

No me pongo a sufrir en una silla dura, ¡por Dios! Me siento cómodo, con mi café en mano, y elijo cartones con números que “siento” que van a caer, como si estuviera prediciendo el ganador de un clásico.

No es que sea infalible, pero me divierto más y a veces pego un par de líneas. Si quieres un truco raro, prueba comprar cartones en el último minuto, justo cuando todos ya están sentados. No sé por qué, pero siento que esos cartones tienen un “vibe” ganador.

Prueba, pero no me vengas con que te arruinaste por seguir mi consejo, ¿eh?