Qué tal, banda, aquí estoy de nuevo con algo que va a hacer temblar sus carteras y sus ideas aburridas de apostar. Estoy harto de verlos estancados en las mismas jugadas predecibles, esas que te hacen perder plata mientras las casas de apuestas se ríen en tu cara. Esta vez, probé un sistema que lleva semanas dándome resultados y, la verdad, no pienso guardármelo porque me encanta restregarles en la cara cuando algo funciona.
Mi nueva estrategia se basa en los corners y las tarjetas, pero no como los básicos que solo miran estadísticas y ya. Aquí va el truco: me fijo en los partidos de las ligas latinas donde los equipos chicos juegan de local contra los grandes, tipo un Atlético Nacional visitando a un Jaguares o un Colo-Colo enfrentando a un Coquimbo. Esos partidos son oro puro porque los árbitros se ponen nerviosos, los locales se matan defendiendo y los grandes se frustran. Ahí es donde entran las tarjetas amarillas y los corners en el segundo tiempo, cuando el desgaste hace que todos pierdan la cabeza.
Llevo tres semanas rastreando patrones. Primero, miro el promedio de corners en los últimos cinco partidos de ambos equipos, pero solo cuento los juegos de local/visitante, porque eso de mezclar todo es para novatos. Luego, chequeo el historial de tarjetas del árbitro en la liga, porque si es de los que saca amarilla por un empujón, ya tengo medio camino hecho. Después, en vivo, espero hasta el minuto 60 y veo cómo va el marcador. Si el grande va perdiendo o empatando, las apuestas a over 3.5 corners y más de 1.5 tarjetas en los últimos 30 minutos son casi un regalo. La semana pasada, con el Millonarios vs. Tolima, saqué 200% de retorno en una sola jugada porque el árbitro se volvió loco y los corners no paraban.
No me vengan con que "es mucha chamba" o "las stats no siempre funcionan". Claro que no siempre funciona, pero esto no es para los que quieren apostar desde el sofá sin mover un dedo. Si no le meten cabeza, sigan perdiendo con sus "intuiciones" de bar. Yo ya estoy viendo cómo mi cuenta crece mientras ustedes discuten si Messi es mejor que Pelé. A ver quién se anima a probarlo y no se queda llorando cuando le explote en la cara por no hacerlo bien.
Mi nueva estrategia se basa en los corners y las tarjetas, pero no como los básicos que solo miran estadísticas y ya. Aquí va el truco: me fijo en los partidos de las ligas latinas donde los equipos chicos juegan de local contra los grandes, tipo un Atlético Nacional visitando a un Jaguares o un Colo-Colo enfrentando a un Coquimbo. Esos partidos son oro puro porque los árbitros se ponen nerviosos, los locales se matan defendiendo y los grandes se frustran. Ahí es donde entran las tarjetas amarillas y los corners en el segundo tiempo, cuando el desgaste hace que todos pierdan la cabeza.
Llevo tres semanas rastreando patrones. Primero, miro el promedio de corners en los últimos cinco partidos de ambos equipos, pero solo cuento los juegos de local/visitante, porque eso de mezclar todo es para novatos. Luego, chequeo el historial de tarjetas del árbitro en la liga, porque si es de los que saca amarilla por un empujón, ya tengo medio camino hecho. Después, en vivo, espero hasta el minuto 60 y veo cómo va el marcador. Si el grande va perdiendo o empatando, las apuestas a over 3.5 corners y más de 1.5 tarjetas en los últimos 30 minutos son casi un regalo. La semana pasada, con el Millonarios vs. Tolima, saqué 200% de retorno en una sola jugada porque el árbitro se volvió loco y los corners no paraban.
No me vengan con que "es mucha chamba" o "las stats no siempre funcionan". Claro que no siempre funciona, pero esto no es para los que quieren apostar desde el sofá sin mover un dedo. Si no le meten cabeza, sigan perdiendo con sus "intuiciones" de bar. Yo ya estoy viendo cómo mi cuenta crece mientras ustedes discuten si Messi es mejor que Pelé. A ver quién se anima a probarlo y no se queda llorando cuando le explote en la cara por no hacerlo bien.