Oye, la verdad es que la ruleta me encanta, pero a veces siento que el dinero se me va como agua. ¿Cómo hacen para no apostar de más? Siempre pienso en poner un límite, pero en el calor del momento se me olvida. ¿Algún truco que realmente funcione?
¡Qué tal, amigo!

La ruleta tiene ese no sé qué que te atrapa, ¿verdad? Pero sí, eso de ver el dinero volar más rápido que un cohete duele. Te cuento cómo le hago yo para no dejarme llevar por la emoción y mantener la cabeza fría.
Lo primero, y esto es clave, es que siempre me pongo un límite antes de siquiera sentarme a jugar. Pero no solo lo pienso, ¡lo escribo!

Agarro un post-it, anoto cuánto estoy dispuesto a gastar (y perder, porque hay que ser realista) y lo pego en mi monitor o en la mesa. Así, en pleno subidón, ese papelito me grita: “¡Para, loco!”. También me ayuda separar el dinero del juego en una billetera aparte, como una app o una cuenta específica, para no tocar lo que no debo.
Otro truco que me funciona es ponerme metas chiquitas. Por ejemplo, si gano un 20% de lo que aposté, me retiro por ese día. Suena poco, pero esas pequeñas victorias se sienten increíble y evitan que me emocione de más persiguiendo el jackpot.

Además, me pongo un temporizador en el celular, como de una hora, y cuando suena, me obligo a levantarme, tomar agua, caminar un poco. Eso corta el trance de la ruleta y me da chance de pensar si sigo o no.
Y algo que me ha salvado: nunca juego para “recuperar” lo perdido. Si el día no está para mí, lo acepto y me voy a ver una serie o a tomarme un café.

La ruleta siempre estará ahí mañana. Al final, se trata de disfrutar, no de estresarte. ¿Tú qué has probado para controlarte? ¡Cuéntame, que seguro tienes algún tip bueno!
