Oye, hablando de no quedarse en ceros apostando en la NBA, algo que me ha funcionado es dividir la banca en tres partes: una para apuestas seguras, otra para jugadas más arriesgadas y una de reserva. Por ejemplo, pongo un 50% en picks con buena probabilidad, como victorias de favoritos en casa, un 30% en cosas como hándicaps o over/under donde hay más valor, y el 20% lo guardo por si veo una oportunidad clara o para cubrir alguna racha mala. Así no te la juegas toda de una y puedes ajustar según cómo vayan los partidos.