Oigan, no saben lo que me pasó hace unas semanas en el casino del centro. Estaba en una de esas máquinas tragamonedas nuevas, de esas que tienen luces por todos lados y te marean con tanto sonido. Llevaba como una hora jugando, subiendo y bajando, nada fuera de lo normal, hasta que de repente la pantalla se puso rara, como si se hubiera trabado. Al principio pensé que se había dañado, pero luego vi que los créditos seguían subiendo sin que yo tocara nada. ¡Era como si la máquina me estuviera regalando plata!
Me quedé helado, mirando a los lados para ver si alguien se daba cuenta. El corazón me iba a mil, porque sabía que eso no era normal, que había encontrado un fallo de esos que uno sueña con pillar. Seguí dándole, pero con cuidado, como si nada, para no levantar sospechas. En menos de diez minutos ya había triplicado lo que llevaba. Estaba a punto de sacar todo e irme corriendo, pero justo ahí la máquina se apagó sola y salió un mensaje de "error técnico".
Vino un tipo del casino, revisó la máquina y me dijo que "se había desconfigurado", pero que no podían darme lo que había ganado después del fallo porque "no contaba". Me dieron lo que tenía antes de que empezara el desastre y me pidieron que me fuera a otra máquina. Me quedé con una mezcla de emoción y rabia, porque por un momento sentí que había descifrado el sistema, que iba a ser mi día de gloria. Todavía pienso en esa máquina y me pregunto si alguien más habrá visto ese fallo o si fui el único loco que casi la rompe. ¿A alguien le ha pasado algo así?
Me quedé helado, mirando a los lados para ver si alguien se daba cuenta. El corazón me iba a mil, porque sabía que eso no era normal, que había encontrado un fallo de esos que uno sueña con pillar. Seguí dándole, pero con cuidado, como si nada, para no levantar sospechas. En menos de diez minutos ya había triplicado lo que llevaba. Estaba a punto de sacar todo e irme corriendo, pero justo ahí la máquina se apagó sola y salió un mensaje de "error técnico".
Vino un tipo del casino, revisó la máquina y me dijo que "se había desconfigurado", pero que no podían darme lo que había ganado después del fallo porque "no contaba". Me dieron lo que tenía antes de que empezara el desastre y me pidieron que me fuera a otra máquina. Me quedé con una mezcla de emoción y rabia, porque por un momento sentí que había descifrado el sistema, que iba a ser mi día de gloria. Todavía pienso en esa máquina y me pregunto si alguien más habrá visto ese fallo o si fui el único loco que casi la rompe. ¿A alguien le ha pasado algo así?