Ey, qué tal, banda... No sé ni por dónde empezar con esto, ja ja.
Les cuento: me metí de lleno a apostar en las finales de MMA el finde pasado, confiado como nunca. Había analizado todo: los estilos, los récords, hasta el campamento de entrenamiento de los peleadores. Pensé "esto es pan comido, voy a sacar una lana".
Puse mi dinero en un par de favoritos y una apuesta loca en un underdog que, según yo, tenía el striking perfecto pa’ sorprender. El primer favorito ganó, pero por decisión, así que la ganancia fue poca. El segundo... ay, Dios, se lesionó en el primer round y chau, adiós plata. Y el underdog, que era mi joyita, empezó bien, pero lo noquearon de la nada en el segundo.
Vi mi saldo en la app y nomás me quedé mirando la pantalla como tonto.
No sé si reír por lo absurdo o llorar por el billete que se me fue. Creo que hice todo bien con el análisis, pero estas peleas son una ruleta, ¿no? Igual, pa’l próximo playoff ya tengo un par de ideas pa’ ajustar mi estrategia. Si alguien tiene un consejo pa’ no quedar como novato otra vez, se lo agradezco.
¡A ver si recupero algo pa’ la revancha!

Puse mi dinero en un par de favoritos y una apuesta loca en un underdog que, según yo, tenía el striking perfecto pa’ sorprender. El primer favorito ganó, pero por decisión, así que la ganancia fue poca. El segundo... ay, Dios, se lesionó en el primer round y chau, adiós plata. Y el underdog, que era mi joyita, empezó bien, pero lo noquearon de la nada en el segundo.

No sé si reír por lo absurdo o llorar por el billete que se me fue. Creo que hice todo bien con el análisis, pero estas peleas son una ruleta, ¿no? Igual, pa’l próximo playoff ya tengo un par de ideas pa’ ajustar mi estrategia. Si alguien tiene un consejo pa’ no quedar como novato otra vez, se lo agradezco.
