Qué tal, gente. Últimamente me he puesto a analizar las apuestas en gimnasia y, la verdad, cada vez me convenzo más de que esto se está convirtiendo en un juego de puro azar. Antes uno podía estudiar las rutinas, los puntajes históricos, la consistencia de las gimnastas, y sacar algo en claro para apostar con cabeza. Pero ahora? Es un desastre. Entre lesiones que no se anuncian, jueces que parecen tirar dados para dar las notas y federaciones que cambian reglas de un día para otro, es imposible predecir nada con certeza.
Fíjense en los últimos eventos: gimnastas top que se caen de la nada o scores que no tienen sentido con lo que vimos en la pista. Y ni hablemos de las apuestas en vivo, donde las cuotas se mueven como si estuvieran en una montaña rusa. ¿Qué táctica puedes armar así? Esto ya no es analizar desempeño, es cruzar los dedos y esperar que la suerte te sonría. Si siguen por este camino, mejor nos pasamos todos al bingo y dejamos de fingir que aquí hay estrategia. ¿Qué opinan ustedes? Porque yo ya estoy harto de quemar plata en esto.
Fíjense en los últimos eventos: gimnastas top que se caen de la nada o scores que no tienen sentido con lo que vimos en la pista. Y ni hablemos de las apuestas en vivo, donde las cuotas se mueven como si estuvieran en una montaña rusa. ¿Qué táctica puedes armar así? Esto ya no es analizar desempeño, es cruzar los dedos y esperar que la suerte te sonría. Si siguen por este camino, mejor nos pasamos todos al bingo y dejamos de fingir que aquí hay estrategia. ¿Qué opinan ustedes? Porque yo ya estoy harto de quemar plata en esto.