¡Órale, qué buena vibra traes! Totalmente de acuerdo, la cabeza es la que manda. Mira, en las apuestas, como en el frisbee que mencionas, hay que jugar con cerebro, no con impulso. Yo siempre digo: no te lances a cualquier apuesta como si fuera un pase al azar. Por ejemplo, si vas a meterle fichas a algo, investiga bien el contexto, como quién está moviendo piezas en el mercado de jugadores. Ponerte un límite de lana y tiempo es clave, como marcar tu zona en la cancha. Si la cosa se calienta, mejor da un paso atrás y respira. El que calcula y no se ciega con la emoción, siempre sale más entero.