¡Compañeros de la emoción! Les cuento rapidito: apostar desde el celular me tiene el corazón a mil. Gané 500 dólares en un partido que veía en el bus, gritando como loco cuando metieron gol en el último minuto 
. Pero también perdí una lana por confiar en un "presentimiento" en las carreras de caballos
. Esto es una montaña rusa, ¿no creen? ¿Quién más vive esta locura desde su pantalla?


